• En vista de que la inflación dificulta los planes de los viajeros, te mostramos algunas sugerencias asequibles para viajes centrados en el vino, la cultura, la comida, el aire libre y más. Foto: Autoridad de Turismo de Santa Lucía

Esta es una traducción hecha por El Diario de la nota Go Here, Not There: Vacation Alternatives for the Budget-Conscious, original de The New York Times.

La inflación, los altos precios de la gasolina y las tarifas aéreas en alza están aumentando los presupuestos discrecionales, lo que obliga a los estadounidenses a repensar los viajes.

En una encuesta de 4.000 viajeros, Destination Analysts –una firma de investigación de mercado–descubrió recientemente que los precios altos mantuvieron en su casa al 38 % de los encuestados en abril; mientras que alrededor del 23 % canceló un próximo viaje. A menos que disminuyan los precios de la gasolina, el 60 % dijo que se quedaría más cerca de casa en sus viajes por carretera esta primavera y verano también.

Sin embargo, todavía puedes viajar sin gastar mucho durante este verano, pero debes ser creativo.

“Mi mejor consejo es reservar con anticipación, ser flexible y no ir a donde van los demás cuando es temporada alta”, dijo Rob Stern, un asesor de viajes con sede en Raleigh, Carolina del Norte, que dirige RobPlansYourTrip.com. “Esté dispuesto a ir a lugares fuera de lo común y a buscar soluciones”.

Con un plan B y la preferencia por los destinos más cercanos a casa, los siguientes lugares alternativos tienen cierta semejanza con los destinos más lejanos, pero cuestan mucho menos. Considéralo como un estímulo para tu propia planificación creativa de viajes.

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En el sur de la Columbia Británica, el valle de Okanagan ofrece muchas bodegas y colinas cubiertas de viñedos, junto con alojamientos, como el Spirit Ridge junto al lago, arriba, que no arruinará su banco. Foto: Spirit Ridge

Bébetelo

Hay muchas regiones con circuitos de bebidas espirituosas para hacer un viaje a Escocia (considera el Kentucky Bourbon Trail) o ciudades enfocadas en la cerveza que podrían saciar tu sed de ir a Alemania (Fort Collins, en Colorado, destaca con más de 20 cervecerías artesanales).

Pero si estás interesado en explorar las regiones vinícolas europeas, América del Norte ofrece una amplia gama de oportunidades para brindar con los viñedos que bordean las colinas más allá del habitual Norte de California.

En el sur de la Columbia Británica, el valle de Okanagan ofrece una gran variedad, desde la bodega indígena Nk’Mip Cellars hasta la moderna Liquidity, llena de arte, y la más rústica Covert Farms Family Estate. Los alojamientos van desde Spirit Ridge, en el lago Osoyoos (desde $ 263), hasta condominios de alquiler en Okanagan Falls cerca del lago Skaha desde alrededor de $ 100.

En el medio oeste, la región a lo largo del río Missouri, aproximadamente a una hora en automóvil al oeste de San Louis, fue llamada “Rhineland” por inmigrantes alemanes en el siglo XIX cuando llegaron y comenzaron a plantar uvas.

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“La mejor uva es la Norton red”, dijo Jerri Hoffmann quien, con su esposo, David Hoffmann, invirtió recientemente en varias bodegas y propiedades de alquiler en Augusta, Misuri, la primera área vitivinícola estadounidense reconocida por el gobierno federal en Estados Unidos, establecida en 1980. “Hacían vinos premiados aquí en Misuri a principios de siglo”, dijo Jerri.

Una de sus cabañas de troncos antiguas se consigue desde $ 229. O puedes dirigirte al cercano Hermann, centro de una de las rutas del vino del estado, para hospedarse en el Inn at Hermannhoff del siglo XIX y sus cabañas en las laderas (con habitaciones desde $ 99).

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En la región de Finger Lakes del estado de Nueva York, los viñedos, las caminatas, los lagos glaciares y las caminatas por las cascadas son algunas de las atracciones. Foto: Cámara de Comercio del Área de Watkins Glen

En Nueva York, la región de Finger Lakes ofrece viñedos con vista a lagos tallados por glaciares, así como aventuras en el agua, caminatas en el Bosque Nacional Finger Lakes de aproximadamente 6.500 hectáreas y caminatas por cascadas en Watkins Glen State Park y alrededor de Ithaca, hogar de más de 150 cascadas.

Los alojamientos más asequibles incluyen Hudson Manor Bed & Breakfast (desde $ 219) y Lakeside Resort, que tiene una variedad de habitaciones y cabañas desde alrededor de $ 160.

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Hermosas playas y paisajes volcánicos son algunos de los atributos que comparten Santa Lucía y Hawái. Foto: Autoridad de Turismo de Santa Lucía

Los sustitutos de Hawái

Es difícil replicar Hawái fuera de las islas, pero el aumento de los precios está obligando a algunos viajeros a intentarlo. La tarifa hotelera diaria promedio allí aumentó casi $ 100 entre marzo de 2019 ($ 282) y marzo de 2022 ($ 378), según la empresa STR, los analistas de evaluación comparativa de hotelería. Y eso ni siquiera aborda los altos precios de los carros para alquilar.

México, con su tipo de cambio favorable, actualmente alrededor de 20 pesos por dólar, es un buen lugar para buscar ofertas de vacaciones en la playa. Al igual que Hawái, el Mar de Cortés atrae ballenas jorobadas en invierno. Pero en verano, el cuerpo de agua que separa el continente de la península de Baja California es un buen lugar para practicar esnórquel y buceo en el Parque Nacional Marino Bahía de Loreto.

Las habitaciones en el hotel boutique 1697 en Loreto actualmente comienzan en alrededor de $ 100.

En el Caribe, Santa Lucía hace un trabajo creíble como una opción distinta a Hawái cuando se trata de los Pitones volcánicos en su extremo sur, donde también encontrarás exuberantes selvas y cascadas. Para ver de cerca, camina hasta Gros Piton, el ocupante ilegal de los dos picos, un ejercicio completo que puede tomar entre tres y seis horas de ida, según los guías de Real St. Lucia Tour que te acompañarán (por $ 50).

“Llamamos a Santa Lucía ‘El Hawái del Caribe’”, dijo Sarah Kline, propietaria de Time For Travel, una agencia de Ensemble Travel Group. “Ambos destinos tienen impresionantes playas, deportes acuáticos, selvas tropicales, montañas, cascadas y volcanes”.

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Si bien la isla a menudo se asocia con resorts de lujo y todo incluido, la oficina de turismo de la isla ha facilitado la búsqueda de pequeños hoteles para vacacionar en una colección llamada “Pepites”, que incluye el alquiler por poco tiempo de Vista Del Piton cerca de las montañas a partir de 80 dólares la noche por dos habitaciones. También puedes ahorrar en vuelos, especialmente en la temporada media del Caribe; una búsqueda reciente de un viaje en junio desde la ciudad de Nueva York a la isla arrojó vuelos sin escalas a partir de $ 343, en comparación con los $ 840 para ir a Honolulu.

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El Boundary Waters Canoe Area Wilderness en el norte de Minnesota. Foto: Paul Vincent

Sal al aire libre

Más allá de las playas, los amantes del aire libre pueden encontrar opciones por los fiordos de Islandia en el Parque Nacional costero Gros Morne en Terranova, o los Alpes de Europa en las Montañas Rocosas de Kootenay en la Columbia Británica. En lugar de los campos de lavanda de Provenza, Francia, conduce por el llamado Hood River Fruit Loop en el norte de Oregón para ver los campos de lavanda con el Monte Hood de fondo.

Sin embargo, será temporada alta en muchos de estos lugares durante el verano, lo que significa que los viajeros inteligentes deben planificar con mucha anticipación y ser flexibles con las fechas.

Por ejemplo, si deseas cambiar los cielos oscuros y llenos de estrellas en Escandinavia por el Boundary Waters Canoe Area Wilderness, un santuario internacional de cielo oscuro en el norte de Minnesota, hazlo ahora. Hay una cuota de ingresos y, aunque los proveedores asegurarán tu entrada, es posible que debas ser flexible con las fechas y las rutas.

Boundary Waters Outfitters en Ely, Minnesota, tiene paquetes para acampar en canoa —suministran el equipo, incluidos botes y tiendas de campaña, además de mapas y alimentos— (desde $ 370 por persona) para dos a cuatro personas durante tres días.

Los viajeros que buscan los volcanes, las selvas tropicales y el espíritu sostenible de Nueva Zelanda pueden encontrar algo de su atractivo más cerca de casa en Costa Rica, donde el verano es más tranquilo. Puede que tengas que aguantar algunos chaparrones, sobre todo en la montaña, pero evitarás las aglomeraciones y los altos precios del invierno.

Algunos alojamientos asequibles incluyen el Hotel Claro de Luna en la zona montañosa de Monteverde (habitaciones desde alrededor de $ 106) y Dulce Uvita, The Small Resort en Puntarenas en la costa del Pacífico (desde $ 107).

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Si estás buscando encauzarte a Francia, no vayas más allá de los cafés y los mercados verdes de Montreal, incluido el mercado Jean Talon (el de arriba) y el mercado Atwater. Foto: Tourisme Montréal

Comida mundial

Una de las formas más fáciles hacerte creer como si estuvieras en otro lugar es a través de la comida, especialmente en los rincones multiculturales de las ciudades de todo el continente.

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La expansión de los centros comerciales que componen el barrio chino de Houston, por ejemplo, es el único indicio de que todavía estás en Texas. En estos días, los restaurantes que sirven comida china, de Hong Kong, vietnamita, tailandesa y de otras culturas asiáticas llenan estos centros comerciales.

Si está buscando encauzarte a Francia, no vaya más allá de los cafés y los mercados verdes de Montreal, incluidos el mercado Jean Talon y el mercado Atwater.

Toronto tiene unas Naciones Unidas virtuales de distritos gastronómicos, desde Little India hasta Little Jamaica. Suresh Doss, un escritor gastronómico que reside en Toronto y se enfoca en los bolsillos multiculturales de la ciudad, creció en los suburbios de Scarborough, donde lleva a pequeños grupos a restaurantes de Sri Lanka, entre otros recorridos gastronómicos por el área metropolitana de Toronto (250 dólares canadienses, o alrededor de $ 195).

“Hay una cualidad efímera en la comida, porque no sabes si estará disponible en 10 o 12 años”, dijo Doss, refiriéndose a las sucesivas oleadas de inmigrantes en los últimos 80 años que se han establecido en Grecia, Hungría y los enclaves de Italia, seguidos por vietnamitas, chinos y ceilandeses y, más recientemente, sirios.

Para los aficionados al bricolaje, Doss recomienda un festín progresivo a lo largo de Danforth Avenue en Toronto, hogar de restaurantes de Trinidad, Venezuela, Japón y Etiopía, entre otros. “Todavía no está completamente aburguesado y tiene un ambiente acogedor”, dijo.

Entre los alojamientos asequibles en Toronto, prueba el Hotel Ocho cerca de Chinatown, donde una búsqueda reciente encontró habitaciones desde 209 dólares canadienses.

La forma más segura de explorar Ucrania en este momento podría ser comer en Cleveland, que tiene fuertes raíces en Europa del Este y una concentración de tiendas y restaurantes ucranianos en los suburbios de Parma.

“No se puede tener un restaurante en Cleveland y no tener algún tipo de pierogi (comida típica)”, dijo Natasha Pogrebinskaya, originaria de Ucrania y chef del restaurante South Side en el vecindario Tremont de Cleveland, destacando la bola de masa hervida que muchas culturas de Europa del Este tienen. (Ella recomienda comerlos al estilo ucraniano, con crema agria y eneldo).

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En Cleveland, los productos culinarios en West Side Market reflejan las culturas de Europa central, oriental y de más allá. Foto: Cody York para ThisIsCleveland.com

“Muchos restaurantes no son específicamente polacos, ucranianos o húngaros, pero sirven comida de Europa del Este”, dijo Susan Chapo, propietaria de Relish Cleveland, que organiza recorridos gastronómicos. Su recorrido principal incluye el West Side Market de la ciudad, inaugurado en 1912, para disfrutar de pierogies, bratwurst, helados caseros y más ($ 71 por persona por tres horas).

“Se puede comer bien aquí, y barato”, agregó.

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Eso también se aplica a los alojamientos; un condominio de Airbnb cerca del mercado cuesta $ 97 por noche.

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En el noreste de Florida, los visitantes pueden disfrutar de la arquitectura colonial española en St. Augustine. Foto: St. Consejo Cultural Johns

Arquitectura y cultura

Cuando se trata de arquitectura, la historia de la colonización de España ha dejado asentamientos españoles en toda América del Norte, incluido el Casco Antiguo en la Ciudad de Panamá, que data del siglo XVII, y las Misiones de San Antonio en San Antonio, Texas, ambos sitios declarados Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.

En el noreste de Florida, St. Augustine afirma ser la ciudad más antigua de Estados Unidos, establecida en 1565, donde los visitantes pueden recorrer el Castillo de San Marcos (fuerte construido por españoles), la Casa Peña-Peck, construida alrededor de 1750 para el Rey de España y la calle más antigua del país, la Avilés. El Festival de Música de San Agustín organiza conciertos de música clásica gratuitos en verano en la Catedral Basílica de San Agustín.

“Es un gran lugar para los aficionados a la arquitectura”, dijo Christina Parrish Stone, directora ejecutiva del St. Johns Cultural Council, una organización artística sin fines de lucro. “Podrías estar casi en Sevilla con las torres de los edificios”.

The Local, un motel modernizado de 20 habitaciones, ofrece una dosis equilibrada de estilo estadounidense, con habitaciones desde alrededor de $ 160.

Para una cita con las culturas inmigrantes, diríjete a Milwaukee para su serie de festivales culturales que se llevan a cabo en la orilla del lago Michigan. Las bandas de polka brindan sonoridad al Polish Fest, del 10 al 12 de junio; German Fest incluye una carrera de Dachshund Derby, del 29 al 31 de julio; y con una lista de bandas, muchas de la Isla Esmeralda, Irish Fest afirma ser el festival de música irlandesa más grande del mundo. Es del 18 al 21 de agosto.

Los fines de semana de festivales siempre están ocupados, pero con planificación, encontrarás tarifas a partir de $ 195 en la moderna boutique Kinn Guesthouse en el artístico vecindario de Bay View.

Desde Milwaukee, conduce unos 160 kilómetros al oeste hasta New Glarus, una ciudad tradicionalmente suiza en un país lechero donde el restaurante Chalet Landhaus de estilo alpino sirve schnitzel y rosti (y tiene habitaciones desde alrededor de $ 193).

“En su mayor parte, parece Suiza”, dijo Tony Zgraggen, nativo de Suiza que se mudó a New Glarus en 1981. Es dueño de Alp and Dell Cheese Store en la ciudad y actúa como cantante principal durante eventos especiales. “No tenemos las montañas”, dijo, “pero tenemos las áreas rurales y las colinas”.

Elaine Glusac escribe la columna Frugal Traveler. Síguela en Instagram @eglusac.

Traducido por José Silva

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