- Los migrantes se negaban a vivir en el albergue de hombres de Brooklyn debido a que indicaron que no cuentan con calefacción para resguardarse de la ola de frío que atraviesa la ciudad | Foto: EFE
La Policía de Nueva York desalojó el campamento de migrantes que se mantuvo durante tres días protestando frente al hotel Watson, en el bajo Manhattan, que albergó a varios venezolanos durante un breve periodo.
Los efectivos terminaron el procedimiento el 2 de febrero luego de que empezaran a desalojar el hotel para ser reasignados a un refugio lejos del hotel. Los migrantes exigían garantías en las condiciones de su nuevo albergue debido a la ola de frío que atraviesa la ciudad.
Los migrantes eran, en su mayoría, hombres que llegaron solos a Estados Unidos, y tuvieron que recoger sus pertenencias y abandonar la acera que bordea al hotel Watson. Gran parte eran venezolanos, pero también había ciudadanos colombianos y ecuatorianos.
Migrantes que vivían en el hotel exigen un refugio con mejores condiciones
Previamente, la policía los había obligado a levantar las carpas donde dormían. Los efectivos llegaron a desalojar completamente el hotel y la protesta de migrantes el lunes 30 de enero, luego de que se les exigiera retirarse entre el sábado 28 y el martes 31 de enero.
Tras el procedimiento, los migrantes tomaron un autobús previsto por las autoridades de la ciudad hasta el albergue temporal en un terminal de cruceros de Brooklyn, que tiene una capacidad para 1.000 personas.
Un millardo para atender los servicios de la ola migratoria en Nueva York
Según las denuncias de los migrantes, en el albergue los han amenazado con cuchillos, han visto a gente drogarse y algunos temen por su vida. Parte de los hombres fueron al albergue en Brooklyn, pero regresaron. “No exigimos un cuarto de hotel, sino un lugar digno para vivir”, dijo otro de los migrantes.
Según reseña EFE, los migrantes protestaban debido a que ese albergue al que fueron reubicados no cuenta con calefacción, las camas están muy pegadas, no contaban con suficientes baños, no tenía un sitio adecuado para asearse y está lejos de la ciudad.
Las autoridades buscan atender la situación migratoria en la ciudad, por lo que la gobernadora Kathy Hochul propuso un nuevo presupuesto para el estado de 227 millardos de dólares, que incluye un millardo para costear los servicios de los migrantes que llegaron desde mayo de 2022.
La ola de migrantes se debe, en parte, a los autobuses que envía el gobernador republicano Greg Abbott desde Texas hacia otros estados gobernados como Filadelfia y Washington. Abbott también ha enviado migrantes a la casa de la vicepresidenta Kamala Harris.