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- El gobierno germano espera detener un efecto dominó en el sector energético al considerar que está atacando el problema “de manera directa”
Alemania se encuentra evaluando la posibilidad de nacionalizar tres de las más grandes empresas importadoras de gas del país tras el colapso energético generado por la paralización del gasoducto Nord Stream.
De acuerdo con información publicada por Bloomberg, la operación implicaría la compra de las operaciones de Uniper SE, VNG AG y Seuring Energy for Europe GmbH. La medida formaría parte de la estrategia del gobierno alemán para atender la compleja situación en materia energética en la que se encuentra sumida el país.
De momento no se han logrado afinar los detalles de la operación, no obstante, personas familiarizadas con las conversaciones indicaron que esto podría finiquitarse en los próximos días.
La situación de gran parte de Europa y en especial de Alemania empeoró luego de que la empresa estatal de energía rusa Gazprom anunció el cierre del gasoducto Nord Stream por tiempo indefinido. El argumento esgrimido por la compañía fue que detectaron una fuga de aceite en una de las turbinas, por lo que por razones de seguridad tomaron la decisión de detener el envío de gas a sus clientes europeos.
Como consecuencia se generó una escalada en los precios del gas en Europa, al punto de que el monto actual es casi ocho veces más alto del promedio para los meses previos al invierno A raíz de esto compañías importadoras como Uniper SE, VNG AG y Seuring Energy for Europe GmbH han tenido que hacer frente a costos operativos más elevados, al tiempo que intentan encontrar nuevos vendedores que les permitan suplir el flujo de gas ruso.
Con la nacionalización de las empresas gasíferas, Alemania pretende aumentar su liquidez de manera tal que puedan poner freno a un escenario en el que se produzca un efecto dominó en la industria energética nacional.
¿Qué dicen las empresas de gas alemanas?
Ante la noticia de la supuesta nacionalización de sus activos las empresas alemanas de importadoras de gas han preferido mantener el silencio, algo propio en este tipo de situaciones, especialmente si se encuentran ultimando los detalles para realizar las transacciones.
La opción de compra de las empresas llega pocos meses después de que el gobierno alemán aprobó un paquete de ayuda a Uniper SE, una de las compañías en cuestión, por un monto de 19 millardos de euros, en un intento por salvarla.
En este contexto de posible nacionalización representantes de la compañía finlandesa Fortum Oyj, la mayor accionista de Uniper (78 %) dijeron que no podían comentar mientras se llevan a cabo las negociaciones. Algo similar ocurrió por parte de los portavoces del Ministerio de Economía alemán y VNG, los cuales también se negaron a comentar al respecto.
Ante este panorama incierto, Alemania ha tenido que recurrir a países como Azerbaiyán para poder mantener sus importaciones de gas. Esto ha llevado a que las exportaciones de gas azerí se hayan incrementado en más de un 30 % en lo que va de año.
Esto ha sido posible, en parte, gracias a la intermediación de la jefa de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, quien viajó en julio a Azerbaiyán para convencer a las autoridades azeríes de aumentar los envíos a Europa.
