Email
- El motín comenzó a las 11:00 am del lunes, cuando tomaron como rehenes a cuatro custodios
Un grupo de detenidos secuestró el lunes 17 de julio a cuatro funcionarios en el Centro de atención al Detenido de la Policía Nacional Bolivariana (PNB) en La Morita, estado Aragua.
Los reclusos que participan en el motín exigieron la presencia de personal judicial y del Ministerio Público en el sitio. Hasta el momento se desconoce si tienen alguna otra exigencia.
El motín comenzó aproximadamente a las 11:00 am y en el lugar se desplegó un operativo de seguridad para intentar mediar con los detenidos. Los secuestrados serían agentes de la PNB que custodiaban los calabozos. De acuerdo con la periodista Gregoria Díaz, se trata de tres hombres y una mujer.
Más detalles del motín
El Observatorio Venezolano de Prisiones (OVP) indicó que los presos pidieron la presencia de un juez y un fiscal para denunciar presuntos abusos y maltratos en el centro de reclusión.
#EnEsteMomento reportan el secuestro de tres policías en el Centro de Atención al Detenido de la PNB en La Morita, #Aragua. Al parecer, los reclusos exigieron la presencia de fiscales del Ministerio Público, pero se desconoce cuál es el motivo del motín. 📹 @churuguara pic.twitter.com/WyCuNRW419
— Obs. V. de Prisiones (@oveprisiones) July 17, 2023
Andrea Rocha, periodista de la entidad, reportó que durante la mañana los vecinos del sector escucharon disparos provenientes del centro de detención. A pocos metros de la institución hay un plantel educativo de Fe y Alegría, un Centro Diagnóstico Integral (CDI) y una cancha deportiva.
A la 1:00 pm se conoció que un fiscal penitenciario y varios policías intentaron dialogar con los presos. Por el momento, se desconoce si lograron llegar a un acuerdo.
Malas condiciones en los centros de detención
El OVP y organizaciones como Una Ventana a la Libertad denuncian constantemente las malas condiciones en los centros de detención, especialmente en los que deberían cumplir esta función de manera preventiva.
Los detenidos deben permanecer por cortos periodos en los centros de detención preventiva antes de ser trasladados a algún penal. Sin embargo, en todo el país se prolongan estas estadías, lo que posteriormente incide en la sobrepoblación y el hacinamiento en estas instituciones.
Las familias de los detenidos reportan además situaciones como malos tratos, privación del alimento, malas condiciones de higiene y la propagación de enfermedades.
En el mes de abril falleció un boxeador que estaba detenido en los calabozos del Cuerpo de Investigaciones Científicas Penales y Criminalísticas (CICPC) en Maturín, estado Monagas.
En ese momento la madre de Robert Bolívar, el detenido, denunció que su hijo murió con 42 kilos menos de los que tenía en el momento de ser aprehendido. La razón de la pérdida de peso fue una enfermedad que le causó picos de fiebre superiores a los 40 grados centígrados.
En vista de que las medicinas no bajaban la temperatura del detenido, la familia solicitó un permiso al Tribunal de Ejecución 2 para llevarlo a una revisión médica, pero nunca recibieron respuesta.
