- El equipo de El Diario consultó con los infectólogos Patricia Valenzuela y Manuel Figuera, quienes indicaron que el esquema 7+7 nunca tuvo fundamento científico. Foto: EFE
Desde junio de 2020 hasta octubre de 2021 el régimen de Nicolás Maduro implementó en Venezuela el esquema 7+7 para tratar de disminuir los contagios por covid-19 en el territorio. La medida consiste en la reactivación de los sectores económicos por siete días y luego siete días de cuarentena radical.
A inicios de 2022, luego de la flexibilización amplia anunciada por el chavismo para noviembre y diciembre Nicolás Maduro anunció que el país no volvería a entrar en el esquema 7+7 pese a la llegada del covid-19: ómicron. Aunque esta metodología fue criticada por los diferentes sectores del país, el equipo de El Diario consultó con especialistas en el área de salud sobre la eficacia del esquema.
El infectólogo Manuel Figuera expresó que el esquema 7+7 siempre careció de fundamento científico y técnico. Prueba de ello es que, a su juicio, con su implementación no hubo un impacto sobre los contagios; sino más bien los afectados fueron en el sector económico y comercial.
La opinión la secundó la infectóloga Patricia Valenzuela al indicar que el modelo no tiene lógica científica. Debido a que los primeros síntomas aparecen entre los días 5 y 7 luego de la exposición al virus y por ello no cree que la medida haya influenciado la situación de la pandemia en el país.
¿Qué ha hecho falta para enfrentar el covid-19 en Venezuela?
De acuerdo con Valenzuela, en el país no ha existido capacidad diagnóstica accesible para todos los ciudadanos y que permita identificar los casos de coronavirus para comprender dónde se concentran los contagios e implementar medidas para frenarlos. Opinó que también se ha carecido de claridad y transparencia, así como de comunicación entre autoridades sanitarias, sociedades científicas y civiles.
El especialista Figuera agregó un elemento importante que en el país no se ha optimizado el sistema de atención de salud y ni se ha capacitado al personal sanitario.
“Tampoco hubo un abordaje terapéutico, coherente y científico de la pandemia en general. En Venezuela ni siquiera hay un plan de vacunación publicado. No existe por parte del Estado una responsabilidad para dar la información epidemiológica correspondiente”, argumentó Figuera.
Desconfianza en la información que proporciona el régimen sobre vacunación
Figuera expresó que es difícil creer que en Venezuela se haya vacunado el 90% de la población, tal como indica el régimen de Nicolás Maduro. Agregó que en la actualidad aún es difícil el acceso a las vacunas. Pues hay regiones del país que están aisladas y de las que no se tiene información sobre el proceso de inmunización.
De acuerdo con datos de Our World in Data y la Universidad Johns Hopkins, quienes desde los inicios de la pandemia han ofrecido información de cifras sobre el covid-19, en Venezuela solo el 36% de la población ha recibido el esquema completo de dos dosis de la vacuna contra el coronavirus.
Dosis de refuerzo ¿llegó tarde?
Valenzuela aseguró que mundialmente existe la información científica adecuada para apoyar una tercera dosis en el país; ya que así la población estaría “un poco más” protegida ante una variante como la ómicron.
“Si bien es cierto que todavía estamos en deuda en cuanto a inmunizar a muchos más venezolanos, tenemos que, en la medida de lo posible, trabajar en vacunar a la mayor cantidad posible, en el mejor tiempo posible y aplicar terceras dosis”, concretó la infectologa.
Para Figuera también es algo necesario, y expusó que la inmunización de refuerzo es tardía en Venezuela. Esto puesto que desde finales de 2021 ya se habían registrado variantes del covid-19 en el país y ya habían pasado más de seis meses desde que las primeras personas recibieron las segundas dosis.
“Por supuesto es importante primero vacunar a la población que aún falta, pero tres dosis, a quienes les corresponden porque ya pasaron seis meses desde la segunda inyección, es algo también positivo. El proceso de vacunación debe ser más activo en su desarrollo”, insistió Figuera.
Casi dos años de pandemia y el sistema de salud tiene los mismos problemas
La infectóloga Valenzuela lamentó que el sistema de salud público siga funcionando exactamente igual a como estaba en los inicios de la pandemia. Mencionó que los hospitales continúan teniendo las mismas deficiencias.
“Los cortes del servicio eléctrico, no hay servicio continuo de agua. Incluso hay instituciones que reciben agua por camiones cisterna; o que tienen plantas eléctricas que usan solo para las áreas críticas del centro de salud porque no se pueden permitir que la planta surta de energía a todo el lugar”, denunció la especialista.
Reconoció que en cuanto a la deficiencia y la falta de insumos en los hospitales, el porcentaje que al principio de la pandemia estaba ubicado en 50%, según estudios realizados por sus colegas, aumentó a 54%. Una diferencia mínima pero que incrementó a la par de los casos de covid-19 en el país.
“El poco material que se tiene en los hospitales se está usando de manera importante porque cada vez hay más contagios. Además, el reabastecimiento de estos elementos no cubre la demanda y el sistema de salud no se ha acondicionado ni optimizado en todo este tiempo de pandemia”, señaló la infectologa.
Por último, tanto Figuera como Valenzuela, hicieron un llamado a los venezolanos para que se vacunen y los exhortaron a cumplir con las medidas de bioseguridad; ya que estas han demostrado mundialmente ser eficaces a la hora de proteger del covid-19 y sus variantes.