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  • Chile no tiene una casa presidencial y Gabriel Boric no cuenta con una residencia propia, lo que lo ha obligado a buscar una vivienda que cumpla con estándares mínimos de seguridad

Gabriel Boric asumirá el cargo como presidente de Chile el 11 de marzo de 2022. Antes de esa fecha debe ubicar cuál será su nueva casa presidencial. ¿La razón? Chile no cuenta con una residencia presidencial fija. 

El problema radica en que Boric es originario de Punta Arenas, en el sur de Chile, y actualmente vive en un apartamento alquilado en el barrio turístico de Bellas Artes, en Santiago de Chile. Su vivienda actual no puede ser usada como residencia presidencial por cuestiones de seguridad. 

Por qué la elección de la casa presidencial de Gabriel Boric es un asunto de Estado
Presidente electo saliendo de su vivienda actual. Foto: La Tercera

Se trata de la primera vez desde el retorno a la democracia en 1990 que un jefe de Estado no tiene una casa en propiedad.

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Además, Boric ha rechazado vivir en zonas exclusivas de Santiago de Chile como lo hicieron sus predecesores. Es por eso que el exdirigente estudiantil se decantó por una vivienda en el barrio Yungay, en la zona centro de la ciudad.

Por qué la elección de la casa presidencial de Gabriel Boric es un asunto de Estado

De acuerdo con medios locales, se trasladará junto a su pareja y primera dama, Irina Karamanos, a una vivienda de 500 metros cuadrados en este histórico y turístico barrio.

Boric barajó la opción de vivir en el Palacio de La Moneda, pero este edificio administrativo no ha sido la residencia de un presidente en más de 70 años. El último en vivir ahí fue Carlos Ibáñez (1952-1958). 

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Palacio de La Moneda

Finalmente, después de varias visitas al barrio Yungay, trascendió en la prensa local que Boric se decantó por una vivienda en ese barrio que cumplía con los requisitos de su equipo de seguridad. Entre las exigencias están: que cuente con al menos dos entradas, que no haya edificios altos en los alrededores desde los que se pueda disparar, tener un hospital cerca, espacio suficiente para mantener reuniones de trabajo y habitaciones para la guardia custodia.

La casa tiene 500 metros cuadrados, 13 dormitorios y nueve baños. El Estado pagará por ella el equivalente en pesos chilenos a 4.100 dólares mensuales.

Chile es de los pocos países de la región que no cuenta con una residencia oficial. A comienzos de este siglo, se pensó construir una casa presidencial estable, en la zona de Cerrillos, pero el proyecto terminó fracasando.

Algunos predecesores de Boric enfrentaron dificultades para encontrar una casa presidencial idónea. El expresidente Ricardo Lagos ( 2000- 2006) debió arrendarle la casa al entonces senador Gabriel Valdés, la cual no contaba con espacios e infraestructura cómoda para el trabajo presidencial. Los demás presidentes vivieron en sus casas originales pero debieron hacer modificaciones. 

El expresidente Jorge Alessandri Rodríguez (1958-1964) fue el que inauguró la tradición de vivir en su propia residencia como gesto de austeridad.

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