- De acuerdo con las autoridades, el autobús tenía una capacidad para 61 pasajeros, sin embargo se estima que iban al menos 100 personas
La Fiscalía de Nicaragua solicitó una pena de 81 años de cárcel para el conductor responsable de la muerte de 16 personas y 47 heridos, en su mayoría venezolanos, el pasado 25 de julio. La imputación del ente de justicia sería de 4 años por cada víctima y 2 años por cada lesionado, reseñó La Prensa de Nicaragua.
El conductor del vehículo involucrado en el hecho fue identificado como Alfredo Antonio Palma, de 41 años de edad. El hombre se declaró culpable del accidente durante su audiencia.
Palma, pidió perdón a los familiares de las víctimas mortales y a todos los heridos. Sostuvo que le cuesta conciliar el sueño porque revive las escenas de dolor y desesperación de los pasajeros involucrados en el suceso.
De acuerdo con las autoridades, el autobús tenía una capacidad para 61 pasajeros, sin embargo se estima que iban al menos 100 personas que buscaban llegar a la frontera con Honduras.
Asimismo, la abogada del conductor solicitó dos años y seis meses de prisión. Se espera que en los próximos días se dicte la sentencia definitiva luego que el juez Efrén Antúnez declare la culpabilidad por los delitos de homicidio imprudente así como lesiones graves y leves.
Migrantes venezolanos lograron llegar a EE UU
Tres venezolanos miembros de una misma familia, y sobrevivientes del accidente de tránsito en Nicaragua, lograron ingresar a Estados Unidos bajo la figura del asilo político.
Leonardo Cortés contó, en una entrevista a La Voz de América, que salió de Venezuela en compañía de dos primos y su tía Dalia Elena Soler, de 37 años de edad, quien falleció en el accidente.
Para Cortés su vida cambió el día del accidente debido a la imprudencia del conductor que acabó con la vida de su tía.
Tras continuar el arduo viaje con el resto de su familia, finalmente lograron llegar hasta Atlanta, en el estado de Georgia. Agregó que las autoridades estadounidenses lo mantuvieron cinco días retenido hasta otorgarle nuevamente su libertad.
Cortés relató que la mayoría de los que iban a bordo del autobús involucrado en el suceso eran migrantes venezolanos. El fin de ese trayecto era acercarse hasta la frontera entre Nicaragua y Honduras. De ahí el recorrido los llevaría por otros países de Centroamérica hasta México, para luego llegar a su destino final en Estados Unidos.
Explicó que en medio de la tragedia familiar pensó devolverse a Venezuela pero sus primos (quienes eran los hijos de la señora Soler) le pidieron que los ayudará a cumplir el último sueño de su madre.
Ayuda en Nicaragua
De acuerdo con el relato de Cortés y su familia, tras el accidente recibieron la atención médica necesaria y toda la ayuda de las autoridades de Nicaragua, por lo que se sienten agradecidos con ellos.
“Estamos eternamente agradecidos con el pueblo de Nicaragua, un pueblo de corazón grandioso. Recibimos mucha, mucha ayuda de parte de Nicaragua, que eso se agradece de corazón. Siempre lo tenemos presente (…) Recuerdo que nos dieron cargadores, chips, incluso hasta dinero”, dijo el sobreviviente.