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  • Líderes del mundo responsabilizan al gobierno de Vladímir Putin por el hecho. Foto principal: EFE

Líderes políticos del mundo se expresaron en contra del gobierno de Vladímir Putin tras conocerse la muerte del líder opositor ruso Alexéi Navalni el 16 de febrero, quien estaba recluido en la prisión ártica (Rusia) desde diciembre de 2023. 

El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, aseguró que Rusia tiene “preguntas muy serias que responder” por la muerte de Navalni. Exigió a Moscú dar información de todos los hechos sobre lo sucedido.

La vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris, responsabilizó al gobierno ruso de la muerte de Navalni durante su intervención en la Conferencia de Seguridad de Múnich, donde estaba también la viuda del opositor ruso, Yulia Navalnaya.

“Si se confirma, esto sería una señal más de la brutalidad de Putin”, expresó Harris. 

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Por su parte, la viuda de Navalni comentó que se enteró de la noticia por medios oficialistas. Hizo un llamado a la comunidad internacional para pedir unidad en la lucha contra “el mal” que, a su juicio, representa Putin.

“Putin y todo su entorno serán castigados por lo que han hecho con nuestro país, mi familia y mi esposo. Serán llevados a la justicia y ese día llegará pronto”, dijo Yulia Navalnaya.

El ministro de Exteriores de Francia, Stéphane Séjourné, dijo que el opositor ruso había “pagado con su vida” su resistencia a un “sistema de opresión” del gobierno de Vladímir Putin, que tildó de “régimen”. 

El presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, también se manifestó por la muerte de Navalni y aseguró que este había sido “asesinado” en la prisión rusa en la que se encontraba.

Las reacciones de la comunidad internacional tras la muerte del opositor ruso Alexéi Navalni
EFE/Sergey Dolzhenko

“Es muy lamentable que Alexéi Navalni haya muerto en una prisión rusa. Para mí es obvio, fue asesinado”, dijo el mandatario ucraniano en una rueda de prensa tras su reunión con el canciller de Alemania, Olaf Scholz.

Otras reacciones de la comunidad internacional tras la muerte de Alexéi Navalni

El presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, responsabilizó al gobierno de Rusia de la muerte del opositor ruso.

“Hizo el último sacrificio por sus ideales (…) La Unión Europea considera al régimen ruso como el único responsable de esta trágica muerte. Los combatientes mueren, pero la lucha por la libertad nunca termina”, escribió Michel en su cuenta de X (antes Twitter). 

La presidenta del Parlamento Europeo, Roberta Mesola, también señaló al gobierno ruso como responsable de la muerte de Navalni, mientras que el primer ministro belga, Alexander De Croo, insistió en la importancia de seguir apoyando a Ucrania en la guerra con Rusia. 

Las reacciones de la comunidad internacional tras la muerte del opositor ruso Alexéi Navalni

Otros representantes internacionales que se pronunciaron en rechazo por la muerte del opositor ruso:

-El primer ministro británico, Rishi Sunak

-El canciller alemán, Olaf Scholz

-El primer ministro neerlandés, Mark Rutte

-El ministro de Asuntos Exteriores español, José Manuel Albares

-El ministro de Asuntos Exteriores de Polonia, Radoslaw Sikorski

Todos los representantes de los distintos gobiernos europeos señalaron al gobierno ruso de responsable y exigieron respuesta de las circunstancias en las que ocurrió la muerte de Navalni. 

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La directora de investigación, promoción y campaña en la organización Amnistía Internacional, Érika Guevara Rosas, también se expresó por la muerte del opositor ruso, lo que consideró un “lento asesinato”.

“Tras años de ser sujeto de tortura, malos tratos, desapariciones forzadas y una prisión injusta e ilegal, el preso de conciencia y líder de la oposición en Rusia muere en custodia del Estado”, escribió Guevara en su red social X. 

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EFE/ Yuri Kochetkov

Muerte del opositor ruso

El 16 de febrero el Servicio Penitenciario de la región de Yamalo-Nenets en Rusia, informó que el líder opositor del gobierno de Putin había muerto de forma repentina en la prisión en la que cumplía condena. 

En un comunicado oficial, el ente mencionó que Navalni, de 47 años de edad, estaba dando un paseo en la penitenciaría IK-3, cuando se sintió mal y perdió el conocimiento.

“Se le practicaron los necesarios procedimientos de reanimación, que no dieron ningún resultado. Los médicos de urgencias constataron la muerte del condenado. Se están estableciendo las causas del fallecimiento”, reza la misiva. 

Tras la noticia, el portavoz de la Presidencia rusa, Dmitri Peskov, se pronunció para indicar que el Kremlin no tenía información sobre las causas de la muerte en prisión de Navalni. Insistió que los médicos deben aclararlo. 

En diciembre de 2023, Navalni fue trasladado desde una cárcel en la región de Vladímir, a menos de 200 kilómetros de Moscú, hasta una prisión en el círculo polar Ártico, cerca de la cordillera de los Urales.

Su postura contra Putin 

Alexéi Navalni era abogado ruso y organizador de las protestas antigubernamentales desde la caída de la Unión Soviética y considerado por la prensa como el “enemigo número uno” de Vladimir Putin. 

En el año 2020, Navalni sufrió un envenenamiento mediante el uso de un agente nervioso, por lo que tuvo que ser hospitalizado y se encontraba en estado grave. La sospecha inicial de que uno de sus objetos personales había sido envenenado antes de su vuelo de Tomsk a Moscú fue confirmada cuando una investigación reveló que el veneno se había aplicado en su ropa interior.

Las reacciones de la comunidad internacional tras la muerte del opositor ruso Alexéi Navalni
EFE/ APA / SERGEI ILNITSKY

Navalni permaneció en coma inducido hasta el 7 de septiembre de ese año, cuando empezó a responder a estímulos verbales. Recibió el alta el 23 de septiembre, pero se quedó en Alemania hasta completar su rehabilitación física.

En 2021 se dispuso a regresar a Rusia para continuar con su lucha contra Vladímir Putin y fue detenido a su llegada dentro del aeropuerto de Vnukovo.

Navlani cumplía una condena de 30 años de cárcel por el supuesto delito de extremismo. También se le interpusieron cargos por financiar e instigar actividades extremistas, crear una organización que atentó contra los derechos de los ciudadanos e involucrar a menores de edad en acciones peligrosas, en referencia a manifestaciones opositoras no autorizadas.

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