- Esta plataforma sostiene uno de los dos enormes mantos de hielo de la Antártida y su colapso podría provocar un gran aumento del nivel del mar
Un grupo de científicos en la Antártida utilizó un robot submarino debajo de una plataforma de hielo, conocida como el glaciar Thwaites, para obtener nuevas pistas sobre el proceso de deshielo en el lugar.
El glaciar Thwaites es considerado como una de las plataformas de hielo menos estables y de más rápido retroceso en la Antártida. También es una de las que genera mayor preocupación en lo referente al aumento del nivel del mar.
El estudio arrojó que el deshielo general del lado inferior en el glaciar fue menor de lo que estimaban. Sin embargo, también descubrieron que el proceso se estaba dando en zonas inesperadas: una serie de terrazas y grietas que se extendían hacia el interior del hielo.
“Nos está proporcionando mucha más información acerca de los procesos que dan origen al retroceso del Thwaites”, aseguró el oceanógrafo Peter E. D. Davis para The New York Times.
Los científicos que participaron en esta investigación pertenecen a la Colaboración Internacional del Glaciar Thwaites de Estados Unidos y al Reino Unido y se instalaron en la Antártida en 2019 para iniciar los estudios sobre este glaciar.
¿Qué es el glaciar Thwaites?
El glaciar Thwaites es una plataforma de hielo que tiene el tamaño del estado de Florida, Estados Unidos, y sostiene uno de los dos enormes mantos de hielo de la Antártida.
A Thwaites también se le conoce como como el glaciar del fin del mundo, debido a que su colapso podría provocar un gran aumento del nivel del mar.
Como consecuencia del cambio climático, el agua tibia corre debajo de la plataforma, el hielo se derrite desde abajo y la plataforma se vuelve cada vez más delgada. En las últimas dos décadas, esta plataforma se desplazó aproximadamente 12 kilómetros tierra adentro.
Icefin: el robot que ayudó a dar con los resultados
Los investigadores a cargo del estudio utilizaron a Icefin, un robot submarino con forma de cilindro, que arrojaron debajo del glaciar Thwaites para explorar las terrazas y grietas donde encontraron el rápido deshielo.
El robot tiene una medida de 22 centímetros de diámetro y cerca de 3,6 metros de largo y transportaba cámaras y equipos de sonido.
Los expertos determinaron que aunque el agua estaba muy por encima del punto de congelación, la corriente lenta y la superposición de agua con distintos niveles de salinidad evitaron que se formara una mezcla que habría hecho que subiera más el calor y se derritiera más hielo
Sin embargo, gracias al uso de Icefin, los científicos descubrieron que el rápido deshielo en las zonas inferior se debe a que la orientación casi vertical de los costados permitía la formación de la mezcla y traía así más calor sobre el hielo.