- Uno de los terrenos fúnebres más icónicos de Caracas luce actualmente repleto de tumbas vacías y abiertas, hierros oxidados, latón doblado, el monte crecido y lápidas rotas
Dicen que morir es lo único seguro que se tiene en la vida, y sí, es verdad. Ahora solo queda reflexionar sobre qué le pasará a tu cuerpo si te entierran en El Cementerio General del Sur.
El cementerio del Sur es uno de los terrenos fúnebres más icónicos y grandes de Caracas, inaugurado en 1876. Es el espacio donde “reposan” los restos de personas destacadas y controversiales de la historia venezolana como: Joaquín Crespo, Rómulo Gallegos, Armando Reveron, Martin Tovar y Tovar, Miguel Otero Silva, Aquiles Nazoa, Eliecer Otayza, Lina Ron, Robert Serra y pare usted de contar.
Es un terreno para sepulturas que desde lo lejos sorprende, pero desde cerca indigna y te obliga a reflexionar.
Camisas, hallaquitas de chicharrón, zapatos, teléfonos en alquiler, La gran oferta de los jean y un miliciano dan la bienvenida por un gran portón blanco. Entramos junto a un cortejo fúnebre que casualmente seguimos desde la autopista.
Una gran laguna con nenúfares y pequeños sapitos le dan al lugar un toque paisajístico: “parece una escena de Monet, si él viviera por aquí lo habría pintado”, pensé… “¿o no?”. Dejé de pensar en Monet cuando vi a un señor lavándose las manos en el agua estancada.
Empezó la caminata con la advertencia de “no mostrar mucho la cámara”, pues, “levanta alertas”. El recorrido se hacía por la vía de los carros y el paisaje eran tumbas que se acumulaban sobre las otras tumbas, lo que sería las camineras entre los sepulcros son ahora mausoleos improvisados de bloques y cementos que contrastan con el mármol y el granito de las antiguas lápidas.
Casi todas están en franco deterioro, las que se mantienen son los vestigios de pequeños monumentos que honran a las que yacen a metros bajo tierra, o eso cree uno.
Lo increíble de este cementerio es que cuando te entierran aquí, ya se sabe de antemano que te van a profanar, de allí mi reflexión del primer párrafo. Buscan ropa, prendas, huesos, dientes y otros elementos que alguna vez fueron sus últimas pertenencias en este mundo. La idea es obtener todo lo que se pueda usar para revender, bachaquear, “brujear” o piratear.
“YA NOS PROFANARON, GRACIAS”: esta muestra de civismo y resignación es el mensaje de bienvenida al Monumento de los Bomberos Metropolitanos. Mensajes como ese se encuentran esparcidos en las numerosas hectáreas de terreno que comprende el cementerio.
Tumbas vacías y abiertas, hierros oxidados, latón doblado, el monte crecido y lápidas rotas es el paisaje que, al afinar la mirada, expone el cementerio.
Es domingo y la afluencia de personas es abundante, algunos le llevan café a sus difuntos, en las tumbas de los infantes les ponen juguetes, otros ponen música. Esta tierra se convierte en un lugar de recuerdos.
Como cualquier lugar importante hay espacios destacados. Las tumbas de Acción Democrática, El Mausoleo de Joaquín Crespo, la tumba de Rómulo Gallegos, Robert Serra, Lina Ron y Otayza.
Lugares de culto como La Corte Malandra y “La santa de los estudiantes” María Francia; El árbol de las casitas, al que se le pide el milagro de poder obtener un inmueble. Estos son algunas de las locuciones que a los nuevos visitantes, como yo, les dicen para entender el significado histórico y espiritual con el que carga el cementerio.
Hay mausoleos tan maravillosos que recuerdan una Venezuela que fue y hoy están tan acabados que reafirman la Venezuela que ahora es.
2 comentarios
Lic. Abraham Tovar. Mis saludos para Ud. y todo el equipo de “El Diario. Muy oportuna la denuncia. Le comento que en el caso de nuestro panteón familiar fue violentado durante esta cuarentena… Entre el mes de agosto y principios de septiembre nos encontramos con la desagradable sorpresa que se robaron primeramente la reja y días después todo el enrejado y techo. A su vez, se llevaron dos placas de marmol que sellaban dos de las 4 bóvedas. El panteón era uno de los que estaba sellado detrás de la tumba del diputado Robert Serra. Le gerencia del cementerio no nos recibió la denuncia, fuimos a la alcaldía del municipio bolivariano Libertador, en sus oficinas de la Av. Lecuna y tampoco fue recibida. Estaremos muy agradecidos si en un próximo reportaje señala la instancia donde nosotros y otras personas afectadas pueden hacer la denuncia a lugar. Los actos de vandalismo en el Cementerio General del Sur de Caracas no están en cuarentena. Hago un llamado a las autoridades responsables de este cementerio para que junto a las autoridades policiales inicien investigaciones sobre esos lamentables actos que en estos momentos nos generan gran preocupación e indignación. Esperamos contar con su apoyo y de todo el equipo de “El Diario”. Abrazos. César Montenegro y flia.
Lic. Abraham Tovar. Mis saludos para Ud. y todo el equipo de «El Diario. Muy oportuna la denuncia. Le comento que en el caso de nuestro panteón familiar fue violentado durante esta cuarentena… Entre el mes de agosto y principios de septiembre nos encontramos con la desagradable sorpresa que se robaron primeramente la reja y días después todo el enrejado y techo. A su vez, se llevaron dos placas de marmol que sellaban dos de las 4 bóvedas. El panteón era uno de los que estaba enrejado detrás de la tumba del diputado Robert Serra. Le gerencia del cementerio no nos recibió la denuncia, fuimos a la alcaldía del municipio bolivariano Libertador, en sus oficinas de la Av. Lecuna y tampoco fue recibida. Estaremos muy agradecidos si en un próximo reportaje señala la instancia donde nosotros y otras personas afectadas pueden hacer la denuncia a lugar. Los actos de vandalismo en el Cementerio General del Sur de Caracas no están en cuarentena. Hago un llamado a las autoridades responsables de este cementerio para que junto a las autoridades policiales inicien investigaciones sobre esos lamentables actos que en estos momentos nos generan gran preocupación e indignación. Esperamos contar con su apoyo y de todo el equipo de «El Diario». Abrazos. César Montenegro y flia.