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- Además, la casa de estudios ha sido víctima del vandalismo en varias oportunidades
Neyda Montiel, decana de la Universidad Pedagógica Experimental Libertador (UPEL) de Maturín, estado Monagas, denunció que más de 5 mil libros podrían dañarse por filtraciones en la estructura que no se han reparado desde hace meses.
Agregó que además del deterioro, el vandalismo es otro de los problemas que enfrenta la casa de estudios y que tiene en peligro a la comunidad educativa.
“Es inmensa la cantidad de libros que estamos a punto de perder por la falta de impermeabilización. Más de 5.000 textos de todas las 14 especialidades que tenemos en el instituto. Además, todos los días nos roban, se llevan ventanas, puertas, pupitres, hasta pizarrones”, indicó Montiel a Unión Radio.
A pesar de estos obstáculos, la decana resaltó que mantienen una matrícula activa de más de 1.200 estudiantes en las diferentes especialidades de la universidad.
Solicitud a las autoridades
Montiel denunció que la sede principal ubicada en la avenida Raúl Leoni se encuentra en pésimas condiciones: sin electricidad, sin agua, sin equipamiento para las labores administrativas y académicas y sin seguridad.
Además, la decana denunció previamente que los vándalos se robaron aires acondicionados, equipos de computación, transformadores, cableado eléctrico, mobiliario, material didáctico y de oficina.
El 24 de mayo el personal que labora en la Institución reportó que las oficinas amanecieron sin puertas, ventanas, bombillos, con lámparas rotas, cables de electricidad guindando en techos y paredes y materiales tirados en todas partes.
Entre las áreas afectadas están la oficina de Secretaría de la UPEL-IPM, el Departamento de Lingüística, Lengua Materna, Inglés y Laboratorios.
Montiel solicitó apoyo a las autoridades gubernamentales en el área de seguridad para que atiendan la situación y no se sigan presentando este tipo de problemas.
Recuperación pendiente
La decana recordó que el gobernador del estado Monagas, Ernesto Luna, se comprometió con la rehabilitación de varios sectores del instituto y la instalación de un módulo policial para disminuir las incidencias delictivas, salvaguardar los bienes activos y la infraestructura.
En julio de 2022 también fueron víctimas de actos vandálicos que dejaron destrozadas varias áreas de la institución.
“Las 58 aulas fueron desmanteladas, han robado y/o destrozado techos, paredes, puertas y ventanas. Igual ha sucedido con los laboratorios de Química, Biología, Física, Ciencias de la Tierra, Informática e Inglés, el auditorio central, bibliotecas, servicios médicos, y el parque automotor. Sin olvidar el daño irreversible que nos causa la destrucción de trabajos que nos han costado años de investigación”, expresó a La Verdad de Monagas.
